¿Dónde está el límite?

Empiezas corriendo 5 minutos un día,
de repente, te ves en una media maratón,
quizás corriendo 365 días sin parar.

Empiezas haciendo 1 largo en la piscina,
de repente, te ves nadando 1 kilómetro,
o quizás nadadno 16 kilómetros en el ebro.

Empiezas haciendo 10 kilómetros de bici,
de repente, ves como 2 horas de bici no
te satisfacen, y subes timanfaya 5 veces.

Corres un triatlón, luego medio IronMan, luego
un IronMan, y dos y cuatro, y nueve.

Y te casas y tienes 2 bebés en casa y te
cambian la vida completamente.
Y aprendes a sonreir,
y entiendes antes no sabías,
pero que no te has equivocado en el camino.

¿Y ahora que?
Te inscribes en el décimo IronMan por si a caso.

Luego te tiras al monte y corres sin mirar atrás
y sientes ese olor a tierra mojada y ese "frío fuera"
desde tu calor interno o quizás oyes un pájaro o miras
la luna.
Y sabes que quieres correr un poquito mas lejos,
y piensas en 160 kilómetros corriendo así,
ininterrumpidamente, 2 noches, 40 horas, 7500 metros
de ascensión acumulada...

Y te preinscribes.

Creo que tenemos un problema, o quizás son ellos los
que lo tienen, aunque hoy también me duela la rodilla.
Me voy a dormir, me levanto a las 6 para irme a correr.
En abril, el desenlace.