miércoles, 25 de septiembre de 2013

Si el sistema no me tuviese atrapado.

Probablemente cogería a mis niños y a Paula y lo dejaría todo,
me compraría una casa en el monte,
lejos de todo, sin cobertura, ni ruidos, ni a penas tecnología,
me dedicaría quizás a correr sin mas todos los días,
y a vivir la naturaleza, cultivar, cocinar y hacer mi propia cerveza, a vivir,…


Correría seguro cada día rumbo a ninguna parte, o arriba de aquella cumbre en la
que siempre sopla una brisa fresca,… correría quizás, directo a la base de mi existencia,
a esa parte que solo acariciamos cuando sobrepasamos el límite,
el límite de lo razonable aunque,….¿que cojones es “lo razonable”?
¿Quién escribió estas normas que nos tienen alienados?.

Intentaría inculcarles a mis niños principios básicos,
de esos en los que ya no ponemos tilde,
fruto de la velocidad que nos rodea y este ritmo vertiginoso,….el maldito ritmo!
y me relajaría cuando  los viese llenos de barro, arena o mojados,
cuando se les cayese la leche al suelo o viniesen tremendamente sucios.


Soy mejor cuanto menos prisa tengo, cuanto más básico soy,
quiero no tener prisa, parar,…y se que puedo, se que puedo elegir,
pero a veces me faltan narices, porque es mucha la responsabilidad
y muy pocas las garantías,….aunque el concepto garantía me haga reir.

 
A veces pienso en que sólo me queda correr y soñar,
soñar que puedo llegar aún mas lejos, bajo estrellas o el sol
y que siendo yo mismo, puedo conseguir todo lo anterior sin necesidad
de cambiar mucho mas que el enfoque, el ying y el yang
y que alguien se quedará con algo de lo bueno que proyecte
al igual que yo intento quedarme con todo lo que percibo de
mis maestros de vida, mis amigos.

El año que viene intentaremos estar en la Western States 100,…
la primera carrera de 100 millas de la historia, que sigue siendo
pura, básica, ruda, sin gradas, sin publicidad,…sólo correr.
Tendremos 30 horas para recorrer 100 millas,
sería un bonito desafío, quiero jugar esa partida, ojalá tengamos suerte
en el sorteo, vamos a bailar un rato!

 

6 comentarios:

SK_ dijo...

Tendrás que estar, porque es el proceso Natural de lo que tienes que vivir, te toca vivir eso y mucho más, esto no ha hecho más que empezar....

stingray dijo...

Hola Pez, me llamo Fernando. Se que esto no tiene nada que ver con este tema pero no se donde meterlo. Mido 1,90 peso 85k; 44 años y me estoy iniciando en el triatlon. Es sobre el tema de las zapatillas. Dime donde podría comentar. Gracias. Un abrazo

Nacho Díaz dijo...

Últimamente cada vez pienso más a menudo en lo que me gustaría cambiar de vida. En vivir más en contacto con la naturaleza, y sin más aspiraciones que estar con mi familia. Sin desear cada cosa material que ahora es imprescindible. Un pequeño huerto abajo de una pequeña montaña donde poder correr sin prisas. Unas gallinas a la que darle la poca comida que nos sobrara cada día. Y tener el doble de horas para jugar con mi hijo, descubrir bichos y flores y no preocuparme porque cada cosa que descubre en el suelo sea una colilla o un cristal roto de una cerveza.

jaimescolano dijo...

O le pones todos los cojones del mundo o equilibras. Las personas son compromisos y los compromisos ataduras. Los compromisos los elegimos, los decidimos... y decidimos estar ligados a ellos. Dentro de mi equilibrio -en la mayoría de las ocasiones es como soñar despierto- juego con mis cojones y de tercera bola pongo la realidad. Y esto es la felicidad, lograr que la mayoría del tiempo estén los tres en el aire.

Anónimo dijo...

Mal que nos pese el sistema nos da de comer ,de todas maneras para los llorones esta el tibet o nepal ,hay boletos muy en cuenta ,seguro ahi el colegio de los niños,el tv cable,el gym,el calor en el invierno o el fresco de un buen aire acondicionado los paga el dalai lama.

Pez dijo...

Gracias SK_
Stingray, lo mejor es que vayas a un sitio especializado, por internet y sin conocernos, estas cosas son peligrosas, espero que lo entiendas, lo siento.
Ai Nacho,...estamos cerca.
Mestre,...en sitonía.