jueves, 9 de diciembre de 2010

OOohhhhhh!!!!

Intento no ser sensacionalista,
no escribir nunca a cerca del dopaje, de esa garrapata
que está enganchada al 99,9% del deporte de élite
y cada vez mas, por desgracia, al deporte amateur y popular
sacándole hasta la última gota de sangre de la forma mas
dolorosa imaginable.

Y es que el reconocimiento social, el ganar,
la victoria, el número 1, el emplear demasiado tiempo,
sudor y dinero para quedarte en la cuneta porque otro si,
imagino que, a muchos, les pesa demasiado.

Es humano y tan comprensible como INJUSTIFICABLE.

Mi hijo Pablo tiene 2 años (casi 3) y quiere correr por la
montaña de mayor con papá, le ha pedido una bici a los reyes y
quiere nadar sin manguitos “ete veano”.

Que sea lo que quiera, pero que sea feliz,
inocente, como hoy, como estos 2 años…

Uno llega a ser deportista de élite y creo
que tiene que renunciar a lo que hoy mi
hijo de 2 años ve en el deporte, sin mas.

















Y es que, en vez de convertirse en abanderado de ilusión
y juego limpio, cada vez pinta mas bastos el tema.

¿Se puede ser feliz en ese estado de constante incertidumbre?
¿de mentira?
¿de “uiiiiiii casiiiii”'s?

Bufffffff que complicado y que cansancio.

Ya no se que pensar,
ya no se que decir,
si resulta cierto lo de Marta,
si resulta cierto lo de Marta,
si resulta cierto lo de mi Marta….





















Mi prueba favorita y mi atleta favorita.

Yo NO me lo quiero creer,
ahora toca lo de siempre,
prudencia, respeto,...lo de siempre
que debería ser lo de nunca.
¿Cómo no voy a querer correr semidesnudo por el monte?
Pureza 100% garantizada.
Nunca ganaré nada quizás, porque llevo 10 años ganándolo todo
cada vez que me pongo unas zapatillas.

Entrenamiento:


Run 5k en 0:24, buenas sensaciones, aunque 
me clavé un cristal en el talón corriendo Barefoot 
y me molesta un poco.
La semana que viene toca médico :(

3 comentarios:

Gustavo dijo...

Hola.
Te llevo siguiendo un tiempo pero nunca me he atrevido a comentar nada, quizás porque no tenía nada que decir...Ahora simplemente te digo que "te envidio", de manera sana, claro. Llevo intentando hacer de "el correr" un hábito en mi vida, pero la irregularidad, la falta de constancia y motivación además de otras excusas absurdas que me busco, hacen de un gesto tan sencillo como salir a correr un rato se me haga una odisea. Por eso "te envidio".
Gracias por tu blog y las sensaciones que transmites, casi sin correr las siento igual.

8^)

Salud!

Pez dijo...

Gustavo, muchas gracias por tus palabras.
Hacen que a uno le entren ganas de seguir exponiéndose aquí cada día, en este diario extraño que empezamos por probar y que, a día de hoy nos tiene casi tan enganchados como el motor del mismo.

Te animo a que sigas peleándote con esas excusas, hay una gran recompensa esperándote ahí fuera.

Un abrazo.

Anónimo dijo...

Preferiría que la gente prefiriera no ganar antes de no confiar en ellos mismos, por que al final, el dopaje no es otra cosa que falta de confianza en uno mismo, ... y no pasa solo en el deporte. Entre eso y que ayer me hice un esguience en la playa (los cangrejos de río ya me dejeron que somos de montaña y no de mar), vaya semanita. Ah!, una cosa, lo del "barefoot" me duele sólo de oirtelo contar, ja,ja...