Sentido corporal con el que se perciben aromas
y sustancias dispersas, como el humo.Esta mañana, cuando me he levantado para correr
mis 20 minutos, llovía.
Tengo la suerte de vivir en una urbanización con una
pequeña superficie ajardinada.
Tras vencer la pereza, he olido a tierra mojada en
la puerta de mi casa.
Mas tarde he completado 21 minutos de carrera por la
orilla de la playa sin lluvia y con un mar calmado.
No se puede pedir nada mas cuando se tiene todo.
¿quién dijo que el dinero da la felicidad?
Somos afortunados.
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